domingo, 20 de marzo de 2011

Estudios de la fonética nicaragüense


Por Francis Mendoza Morán
¿Qué es la fonética? El DRAE nos dice que es “Perteneciente o relativo a la voz humana”. Es decir, lo referente a cómo un determinado grupo de hablantes  pronuncia su idioma, aquí se incluyen los cambios que una palabra o frase pueda presentar durante un momento dado o a través del tiempo. La fonética es una de las variantes dialectales estudiadas a nivel del español hablado en América, España y demás zonas donde se habla este idioma. Todas las lenguas poseen su fonética.   
Para realizar estos estudios se requiere de aparatos especializados como cedé, casé, cintas, programas de informática, grabadoras digitales o celulares que permitan la transparencia del sonido y otros. Estos tienen que demostrar la recopilación oral de los hablantes entrevistados de un periodo determinado y a la vez la identificación de las variables fónicas ya sea de un fonema vocálico o consonántico. Como también aquellos fenómenos que tienen que ver con el acento, la entonación y demás. En esta tarea la fidelidad del sonido grabado es determinante. Las cintas compiladas hasta el momento por diferentes autores nacionales están dispersas y no conllevan a un análisis integral. Los enfoques son diferentes, así como también la metodología empleada. Sin embargo, esas muestras orales son una demostración del gran esfuerzo que se ha hecho por intentar acercarnos hacia una caracterización fonética de los nicaragüenses. A continuación presento algunos trabajos relevantes (desde Heberto Lacayo 1951-1952 hasta el de María A. Rosales 2008) en cuanto a esta variante del español hablado de Nicaragua.
Uno de los primeros estudios representativos para la fonética nicaragüense es el realizado por Heberto Lacayo, titulado Cómo pronuncian el español en Nicaragua. (1951-1952). En este destaca algunas de las características generales del nicaragüense y especifica que sus anotaciones se basan en aquellos informantes que solamente hablan español. Delimita las características de sus noventa hablantes seleccionados: trabajadores, de treinta a cuarenta años de edad y representativos de todos los departamentos de Nicaragua. Se guió por El Cuestionario Lingüístico Hispanoamericano de Tomás Navarro. Usó la simbología fonética del Manual de pronunciación Española, del mismo autor.
Los principales rasgos fonéticos identificados los dividió en vocálicos y consonánticos. En el estudio sobre las vocales se destacan: el fonema media, posterior, sonoro /o/ no acentuado, o cuyo acento se transfiere a la vocal siguiente, se convierte en la semiconsonante [w] cuando va seguida de la vocal baja, central sonora /a/, media, anterior, sonora /e/ y la alta, anterior, sonora /i/  en palabras como: - juaquín-Joaquín-; cohartada- cuartada; pueta-poeta; toduéso-todo eso y otros más. La media, anterior, sonora /e/ no acentuada, o cuyo acento se transfiere a la vocal siguiente, se convierte en la semiconsonante [j] cuando va seguida de la baja, central, sonora /a/, de la media, anterior, sonora /e/, de la media, posterior, sonora /o/ y de la alta, posterior, sonora /u/; tales son las palabras: apiár-apear; diótro-de otro; - diusté-de usted. La media, anterior, sonora /e/ se convierte en la semivocal [i] cuando va precedida de la baja, central, sonora /a/ acentuada, en casos como: micáila-Micaela; rafáil-Rafael y demás. El autor indica que la pérdida de vocales es general en casos sintácticos: cósarbitrária-cosa arbitraria.  Mientras tanto,  se pierde la baja, central, sonora /a/ final de palabra seguida de vocal: paroctávio-para Octavio; parír-para ir. De igual manera se pierde la baja, central, sonora /a/ en final de palabra seguida de la preposición de, la cual se convierte en  la media, anterior, sonora /e/: casepiédra-cosa de piedra. La media, posterior, sonora /o/ final de palabra se pierde ante la alta, posterior, sonora /u/: ténguníjo-tengo un hijo. Y el último caso que presenta en relación al comportamiento fónico de las vocales afirma que ciertas formas del presente de indicativo se distinguen de sus correspondientes formas de subjuntivas por su función en la frase.
Los principales fenómenos identificados en cuanto a los fonemas consonánticos son los siguientes: la /b/ a veces se convierte en /p/: osbaldo-opaldo. Otras va cuando va seguida de consonante se convierte en /k/ o /g/ fricativa: aksolúto-absoluto. El fonema oclusivo, dental, sonoro /d/ se convierte a veces en /t/ o /l/: atministradór-alministradór-administrador. Señala que la tendencia hacia la consonante fuerte es también evidente en las semiconsonantes y en las semivocales: guéso-hueso;yélo-hielo. El hiato, variante importante, la indica con una fuerte tendencia a deshacerlo, según sus resultados. En casos como: díya-día; fríye-fríe. Encontró con menor frecuencia la abundancia del sonido de /y/ en combinaciones ea,eo,eu, oí, aí, eí: féya-fea; séya-sea; ayído-oído. Profundizó en el comportamiento fonético de los grupos nn, nm, mn, mm, gn, gm. Solamente aporta quela nasal, alveolar, sonora /n/ se articula como velar [ŋ] en palabras innumerable, inmediato, columna y demás. Esta velar se mantuvo en posición final de palabra. También estudió casos de grupos consonánticos como ns y sf. El fonema fricativo, alveolar, sordo /s/ lo aborda en diferentes contextos fónicos y destaca que en posición final de palabra la tendencia mayoritaria es realizarla como una aspiración [h]. 
Finalmente, el autor realiza sus disertaciones sobre el caso de la entonación de los hablantes seleccionados. Diferencia entre la pronunciación de los parlantes cultos y populares. En esta parte se valió como base de comparación con la obra de Tomás Navarro,  Manual de entonación española.
Los alófonos de los fonemas característicos utilizados por los hablantes del barrio Farabundo Martí de Managua. Así se titula el trabajo de investigación realizado por dos profesores de la UNAN-Managua, Germán Rodríguez Domínguez y Francis Mendoza Morán en el año 1998. Describe a las variantes alofónicas más representativas en los veinte hablantes entrevistados de ese barrio de Managua. El análisis de los resultados fue posible después de efectuada la transcripción literal, fonológica y fonética de cada una de las entrevistas aplicadas. Los datos se reflejaron a través de cuadros estadísticos y diagramas. Se aplicó el Alfabeto de la Revista de Filología Española RFE. Este estudio es importante porque presenta algunos alófonos vocálicos y consonánticos identificados en los informantes seleccionados. Se encontró que el fonema /b/ es sufre fricción y omisión. Igual caso ocurre con /d/. /s/ refleja un porcentaje mayoritario en aspiración y en segundo lugar la elisión. /n/ se mantiene como tal, en segundo lugar se dentaliza [ņ] y por último se velariza [ŋ]. Luego aparece /g/ con un alto porcentaje de fricatización y le sigue la elisión. Después se ubica la vocal /u/, su presencia como semiconsonante y semivocal es representativa. Y por último expone a la vocal /i/, también con alta representatividad como semivocal y semiconsonante. Esta investigación expone en su enfoque variables sociolingüísticas como: sexo, edad y  nivel de escolaridad, sin embargo no explica la incidencia en los resultados de los alófonos encontrados. 
Otro estudio que aporta a la profundización de esta variante dialectal (fonética) es el de Francis Mendoza Morán, realizado en el año 2000 y aborda la temática: Algunas características fonéticas del habla nicaragüense. Para cumplir con los objetivos propuestos en su trabajo seleccionó a cuarenta informantes: diez de Chinandega, diez de Managua, diez de Matagalpa y diez de Rivas. (Veinte mujeres y veinte varones), de diferentes edades, sexo, ocupación y estado civil. Les aplicó  entrevista con preguntas abiertas. Realizó transcripción fonética, según Revista de Filología Española RFE. Y luego identificó alófonos de los fonemas vocálicos y consonánticos. Destaca en sus conclusiones finales que la aspiración del fonema fricativo, alveolar, sordo /s/ se realiza aspirado [h] en posición intermedia y final de palabra. Igual ocurre con el fricativo, interdental, sordo /ө/, especialmente en sílabas contiguas. Se produce la diptongación y asimilación, como recurso de economía lingüística. El fonema nasal, bilabial, sonoro /m/ se pronuncia como [n]. Se produjo seseo, ante el grafema c cuando se une con las vocales e, i y el uso del fonema fricativo, interdental, sordo /ө/. Omisión del fonema oclusivo, dental, sonoro /d/ en posición final de palabra. Resalta el comportamiento del grupo ct, este se articula como el oclusivo, velar, sonoro /g/. Identificó nasalización de los fonemas vocálicos y finalmente añade que el fonema nasal, alveolar, sonoro /n/ se velariza [ŋ] ante pausa. Esta investigación fue presentada por la autora para optar al título de Máster en Filología Hispánica en la UNAN-Managua. (Inédita). Sus conclusiones coinciden, en su gran mayoría, en las observaciones indicadas por H. Lacayo y M. Auxiliadora Rosales.
Luego en el año 2002 se realizó otro trabajo similar por la misma autora. El tópico del estudio: Algunos alófonos de los fonemas del español de Nicaragua. Este se expuso en ese año en San José, Costa Rica en el “XIII Congreso Internacional de la Asociación de lingüística y Filología de la América Latina” (ALFAL). En ese evento participaron catedráticos e investigadores de diversos países del mundo como: España, Venezuela, Argentina, Colombia, Puerto Rico, Cuba, Guatemala, El Salvador, Honduras, Panamá y otros. Mendoza, aplicó muestreo aleatorio estratificado en veinte informantes correspondientes  a los departamentos de Bluefields, Matagalpa, Masaya, Managua, León, Carazo, Chinandega, Granada, Boaco y Rivas. Las entrevistas fueron dirigidas con preguntas abiertas. Transcribió cada una fonéticamente y después localizó variantes alofónicas referentes a las vocales y consonantes. Los principales versan sobre: la aspiración del fonema fricativo, alveolar, sordo /s/, este se realiza así en posición intermedia y final de palabra. El seseo se comprobó una vez más ante el grafema c cuando se une a las vocales i, e y del fonema fricativo, interdental, sordo /ө/. La omisión del fonema oclusivo, dental, sonoro /d/ en posición final de palabra. Velarización del fonema nasal, alveolar, sonoro /n/ ante pausa mayor y menor. Los resultados son significativos y aportan a la caracterización fonética de nuestro país.

El siguiente tratado Atlas lingüístico de Nicaragua, nivel fonético (Análisis geolingüístico pluridimensional) de María Auxiliadora Rosales Solís 2008,  es uno de los primeros que enfoca el estudio de la fonética nicaragüense desde la perspectiva sociolingüística. Aplicó el método de la geografía lingüística por tanto, seleccionó a las localidades y a los informantes. Luego realizó encuestas, transcribió los datos y elaboró los atlas lingüísticos. Seleccionó los quince núcleos departamentales: Chinandega, León, Managua, Masaya, Granada, Carazo, Rivas, Madriz, Estelí, Jinotega, cuatro de Matagalpa, Boaco, Chontales, Río San Juan, Región Autónoma del Atlántico Norte y Región Autónoma del Atlántico Sur (cuatro hablantes en cada uno de ellos). Las conclusiones generales a las que llegó la autora son: los datos analizados permiten inferir análisis estructural, geolectal, diasexual y diageneracional. Generalmente las vocales finales /-a/, /-e/ y /-o/  se pronuncian plenas en la mayor parte del territorio. De igual manera que alófonos tales como [a], [  ], [a];   [e], [ε], [e]; y  [o], [u], [ọ]. El porcentaje de mayor frecuencia en la abertura lo presenta la vocal media anterior /e/.  También se presenta la tendencia a la nasalización vocálica cuando se pierde la velar /n/ en palabras como [´pãø].
Entre los alófonos vinculados a los fonemas consonánticos se encuentran: que los fonemas oclusivos sonoros /b, d, g/ conservan este rasgo tras diptongo. La /d/ intervocálica se articula mayoritariamente como aproximante [ ð̞ ]. Este resultado es muy relevante, pues rechaza las afirmaciones de Caravedo (1992), Quesada (1990), Vaquero (1996) quienes han considerado a nuestro país como zona de elisión de este fonema en esa posición. Como se observa los anteriores trabajos tampoco la reflejan. Luego el comportamiento de /f/se realizó generalmente como labiodental fricativo sorda [f]. La pronunciación de /s/ obtuvo seis realizaciones fonéticas: [s], [Ѳ], [z], [h], [¿], [ø]. Según la autora, la elisión de /y/, en posición intervocálica, es el uso de mayor extensión en el habla nicaragüense. El fonema fricativo velar /x/  presenta variantes: [x], [h], [x] y [ø], en casi todo el territorio predomina la realización fricativa laríngea o glotal sorda [h], muy relajada. La  africada palatal sorda /ʧ/ presentó dos alófonos [ ʧ ] y [∫]. La nasal alveolar sonora /n/, se realiza como nasal velar [ŋ] en posición final. Variante también reflejada en los anteriores trabajos. /r/ múltiple se conserva plena en la mayoría de las regiones estudiadas. La /ɾ/ vibrante simple alveolar, ante consonante se mantiene en todas las posiciones.
Esta investigación refiere a la distribución diatópica y los datos obtenidos facilitan la definición de tres zonas dialectales: Pacífico, Central y Caribe o Atlántica. En la zona del Pacífico hay mayor tendencia a la abertura vocálica, alternancia entre la oclusividad y fricatización, mayor aspiración de /s/, relajamiento de /x/, realización polifónica  entre [ ʧ ] y [∫]. En la zona Central la tendencia es a cerrar /o/ en posición final en Estelí, Jinotega y Matagalpa. También se produce aspiración de /s/ hasta llegar a la pérdida. Y en la zona del Caribe o Atlántica se registran los mayores niveles de concentración de /s/ y rasgos esporádicos de la velar. Esta investigación refleja un estudio que en su amplitud abarca el análisis fonético vinculado a aspectos diatópico, diasexual y diageneracional. Cabe destacar que este obtuvo un premio por parte de la Real Academia Española en el año 2010 y hasta el momento se considera el más completo.
También se destacan trabajos diversos de investigación que han demostrado dominio y calidad científica en los fenómenos fonéticos estudiados (monografías, trabajos de cursos, trabajos de seminarios) que los estudiantes de Filología y Comunicación, y  de Lengua y Literatura han desarrollado bajo la tutoría de las catedráticas del Área Lingüística de la UNAN-Managua, Zobeyda Zamora, M. Auxiliadora Rosales y Francis Mendoza Morán. Cabe destacar que algunos de ellos participarán en el VI Simposio del habla y la literatura nicaragüenses que se realizará en el mes  de agosto de 2011.
Valoro y reconozco todos los esfuerzos que se han realizado por profundizar en la esta variante dialectal. Los diferentes estudios de investigación a nivel nacional así lo demuestran. Queda mucho por hacer y hay diferentes compromisos por cumplir. Experimentar en la variante fonética, es muy complejo y requiere un poco más de disciplina y paciencia por parte del investigador para poder descubrir y demostrar un fenómeno determinado.       
Actualmente, en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (Managua) en el Departamento de Español, Área Lingüística, los trabajos de investigación con énfasis  en la fonética, son orientados desde una perspectiva sociolingüística y se rigen bajo la orientación del Proyecto para el estudio sociolingüístico del español de España y América, denominado PRESEEA. Este pretende la creación de un corpus de lengua española hablada representativo del mundo hispánico en su variedad geográfica y social. Esos materiales se reúnen atendiendo a la diversidad sociolingüística de las comunidades de habla hispanohablantes. Agrupa a cerca de 40 equipos de investigación sociolingüística. Es el fruto del trabajo coordinado de investigadores comprometidos con una metodología común para reunir un banco de materiales coherente que posibilite su aplicación con fines educativos y tecnológicos. En un futuro Nicaragua tendrá su corpus de grabaciones orales, es decir contará con un banco de datos fónicos que accederá a  la identificación de nuestras variantes alofónicas, compartidas y diferentes, de los restantes países hispanos. Entonces, ¡adelante!, ¡trabajemos juntos, investigadores, lingüistas y amantes de la pronunciación del español nica!